El último entrenamiento de Brasil antes de viajar rumbo a Sao Paulo, donde el jueves jugará el partido de inauguración del Mundial-2014 ante Coracia, se llevó a cabo en Teresópolis con frío y lluvia.
El último entrenamiento de Brasil antes de viajar rumbo a Sao Paulo, donde el jueves jugará el partido de inauguración del Mundial-2014 ante Coracia, se llevó a cabo en Teresópolis con frío y lluvia.
Una parte de los jugadores llevaba gorros oficiales de la Seleçao para protegerse de la fina lluvia, el viento, la niebla y el frío que reinaba en el centro de entrenamiento de Teresópolis, situada a 800 metros de altitud en la montaña al noroeste de Rio de Janeiro.
En el aspecto táctico, el seleccionador Luiz Felipe Scolari alineó a su 11 habitual para un partidillo en un terreno reducido. Pero luego lo modificó, haciendo pasar al centrocampista Ramires al primer equipo en detrimento de Oscar, que ocupa la posición que suscita más debate en el equipo.
Tras el enfrentamiento, Neymar, Dani Alves y David Luiz se entrenaron a tirar saques de falta con Jefferson en la portería. Luego William probó disparos con las piernas derecha e izquierda.
Hulk, el delantero que marcó en el partidillo de entrenamiento, fue el primero en retirarse al vestuario. Una decisión que probablemente se debió más a una medida de precaución que a una preocupación.
Texto y foto: AFP
Edición: conmebol.com
